jueves, 25 de agosto de 2011

El inicio

Buenas, hoy decidí crear este blog acerca de algo que sólo padece aproximadamente el 3% de la población, "El hipotiroidismo", enfermedad que me detectaron a principios de este año. Nunca pensé que la fuera a padecer y menos aún que me afectara tanto; sin duda, muy pocas son las personas que comprenden por los que pasamos  los hipotiroideos día a día, sólo nosotros y nuestros médicos saben lo duro que es vivir el resto de tu vida sabiendo que si no te tomas una pastilla a diario, comes saludablemente y haces ejercicio puedes incluso hasta morir. No obstante, haciendo todo lo que nos manda el médico que nos esté tratando podemos estar mejor pero igual, los síntomas son tan agotantes, a veces no podemos sostenernos de pie y hasta el estar sentados nos cansa. 


Es difícil saber que tu mente te dice que puedes mientras que tu cuerpo se niega a hacer lo que le pides. Sólo tengo 16 años y me dicen que parezco de 80 por lo cansada que siempre estoy... y muchos me preguntan ¿Por qué si antes eras tan atlética, ahora siempre estás cansada y quejándote de todo?, mi única respuesta es mi enfermedad, pero ¿Qué hay de la fuerza de voluntad? definitivamente nunca la pierdo, de ser así no seguiría haciendo ejercicio o dietas... lo que realmente me afecta psicológicamente es subir de peso de manera incontrolada y no luchar contra mi ansiedad y cansancio me acerca más a donde no quiero llegar... 



Y yo escribo y escribo y nada que explico de qué se trata esta enfermedad, bueno aquí les dejo una clara definición:

"Hipotiroidismo: Es una afección en la cual la glándula tiroides no logra producir suficiente hormona tiroidea"

En cuanto a los síntomas tenemos: 

Síntomas iniciales:
  • Ser más sensible al frío.
  • Estreñimiento.
  • Depresión.
  • Fatiga o sentirse lento.
  • Períodos menstruales abundantes.
  • Dolor muscular o articular.
  • Palidez o piel reseca.
  • Cabello o uñas quebradizas y débiles.
  • Debilidad.
  • Aumento de peso (involuntario).
Síntomas tardíos, sin tratamiento:
  • Disminución del sentido del gusto y el olfato.
  • Ronquera.
  • Hinchazón de la cara, las manos y los pies.
  • Discurso lento.
  • Engrosamiento de la piel.
  • Adelgazamiento de las cejas.

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